Enero 22
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
EFESIOS 5:15-17 SEÑOR: RESUELVO APROVECHAR EL TIEMPO Y NO MALGASTARLO
“Solo el cristiano sabio aprovecha bien el tiempo y en vez de malgastarlo decide sabia y bíblicamente administrarlo.”
No existe ninguna persona que siempre haya manejado su tiempo sabiamente. Todos hemos perdido algo de nuestro tiempo, pero a la vez, todos tenemos la oportunidad de comenzar a utilizarlo sabiamente. Independientemente de nuestra raza, educación, o condición económica, a todos Dios nos da el mismo tiempo cada día y no todos han adquirido la disciplina de usarlo sabiamente.
Otra realidad que enfrentamos es la siguiente:
-Segunda realidad: Que el tiempo pasa inexorablemente y todos hemos perdido parte de él. No podemos recuperarlo, pero todos podemos aprender lecciones para evitar malgastar el tiempo que deberíamos aprovechar.
El tiempo sigue pasando inexorablemente independientemente de la forma cómo lo utilicemos. No podemos detener el tiempo, pero todos tenemos la capacidad de controlar cómo lo usamos. Lo que cada persona hace con él, determina lo que esa persona será.
Nuestra obligación es seguir esta orden divina:
La Biblia dice: “15 Así que tengan cuidado de cómo viven. No vivan como necios sino como sabios. 16 Saquen el mayor provecho de cada oportunidad en estos días malos. 17 No actúen sin pensar, más bien procuren entender lo que el Señor quiere que hagan.” (Efesios 5:15-17)
La orden es “Saquen el mayor provecho”, utilicen bien el tiempo para obtener ganancia, en otras palabras, deben redimir el tiempo. Redimir algo significa tomar propiedad de él. Cristo nos redimió y eso significa que nos compró del mercado de esclavos del pecado en que nos encontrábamos para que seamos sus esclavos. Nos hizo su posesión. Nosotros debemos volver a poseer el control del tiempo para no desperdiciarlo. Nadie puede tomar la decisión por usted, nadie puede obligarlo porque puede utilizar su tiempo apropiadamente frente a los demás, frente a sus padres, sus jefes, sus cónyuges, pero igual, su tendencia será a desperdiciarlo cuando esté solo y tenga la oportunidad. Debe tomar la decisión de no perderlo, de trabajar más responsablemente, utilizarlo más enfocadamente. Debe decidir dejar de hacer cosas que pueden ser placenteras pero inútiles para el propósito que Dios tiene para su vida. Significa que ahora debe darle valor al tiempo e invertirlo en el cumplimiento del propósito que Dios tiene para su vida.
Para redimir el tiempo elimine la idea de tener que complacer a todas las personas, no podrá hacer feliz a todos ni satisfacer todas las demandas. Ordene sus prioridades e invierta su tiempo ordenadamente sin ceder a ninguna tentación ni distracción. Aprenda a decir “NO” a lo secundario y “SI” a lo prioritario, no permita que le domine la tiranía de lo urgente y cumpla lo que es realmente más importante. Nuestro deber es utilizar nuestro tiempo para complacer a Dios y sus planes y propósitos para nosotros y no nuestros gustos y los deseos de otros.
Compromiso:
Señor, me comprometo a usar con diligencia e inteligencia el tiempo que me das para ser un buen administrador de él.
LECTURA BÍBLICA: Efesios 5:15-17