Julio 6 Principios Devocional

Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.

Tema: Aborto: no matarás, la orden divina de defender la vida.

SALMO 139:16  EL ADN DEL BEBÉ NO NACIDO YA INCLUYE TODO EL PROPÓSITO DIVINO PARA EL SER HUMANO

“Para los cristianos un bebé no nacido es un ser humano, aunque no esté totalmente desarrollado. Desde su concepción y en su ADN ya está incluido todo lo que será y nadie tiene derecho a impedir lo que Dios quiere que sea.”

Los fetos son seres humanos únicos, individuales y totales desde la concepción. Una persona es persona si por su naturaleza tiene la capacidad de desarrollarse y sin duda el bebé se seguirá desarrollando en el vientre e incluso podrá pensar racionalmente y expresar sus emociones aun dentro del vientre materno; en su ADN desde la concepción ya está incluido todo lo que será. El ADN o el Ácido Desoxirribonucleico, es una molécula presente en casi todas nuestras células que contiene la información genética. Esta molécula posee el código que determina todas las características y el funcionamiento de un individuo. Es, además, la encargada de transmitir la información de lo que somos a nuestros hijos, la molécula de la herencia. Dios es quien creó al ser humano para que cuando se inicie la vida, esté determinado todo lo que será y Dios se lo reveló al salmista cuando dice: “Me viste antes de que naciera. Cada día de mi vida estaba registrado en tu libro. Cada momento fue diseñado antes de que un solo día pasara.” (Salmo 139:16)

Un bebé es un ser humano, aunque no está totalmente desarrollado y por ser un ser humano también es una persona. A un tigre lo calificamos como felino porque es un tigre, así también calificamos como humano a un bebé antes de nacer porque es un ser humano, porque en su naturaleza eso es lo que realmente es. Ese ser humano tiene derechos y debe ser protegido por las leyes y por todos los demás seres humanos. Estoy seguro de que nadie está de acuerdo con quitar los derechos de las personas. Todos condenamos a Hitler y al nazismo que asesinó a millones de seres humanos por considerarse superiores. Condenamos el racismo que ocurrió cuando seres humanos eran tratados como ciudadanos de segunda categoría. Seres humanos que se creían superiores no los trataban como seres humanos con valor y dignidad y debemos condenar y seguir condenando a quienes no consideran a un bebé como persona, sólo porque aún no sale del vientre de su madre y pese a que, si se le permite continuar nacerá para su propósito.

Tristemente los enemigos del cristianismo no aceptan que la vida comienza en la concepción, aunque genéticamente este presente todo en lo que se convertirá esa persona; tampoco termina en si el bebé es humano, pues sin duda es humano pues está en el vientre de un ser humano y no de un animal.

Aun los científicos tienen posiciones distintas dependiendo de si son creyentes en Dios o no creen en su existencia.  La verdad es que es imposible que quienes creen en Dios se pongan de acuerdo con quienes no creen en Dios porque tampoco creen en la creación divina, el pecado, ni siquiera creen en la Biblia y mucho menos en la moral cristiana. Pero si usted es cristiano, NO PUEDE CREER LO MISMO QUE LOS PAGANOS, si cree como ellos, posiblemente no ha conocido al Dios de la Biblia ni comprende o rechaza la moralidad bíblica.

Compromiso:

Señor, creo que el ADN del bebé no nacido ya incluye todo el propósito de divino para el ser humano y por lo tanto es una persona y quienes eligen abortar, eligen pecar.

LECTURA BÍBLICA: Salmo 139:16