Mayo 30
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
Cuadragésima séptima semana: principios de esperanza.
PROVERBIOS 31:30 EL PROPÓSITO DIVINO PARA LA MATERNIDAD
“Dios determinó en forma soberana que la mujer sea el medio que utilizaría para el nacimiento de los humanos y que ellas sean las encargadas de amar y guiar a sus hijos para conozcan cuales son los valores divinos que al ser aplicados les permitirán vivir para cumplir la razón de su creación.”
La maternidad es la asignación divina para que la mujer sea el canal por donde fluye la vida humana que procede de Él y para que sea institutriz que modela y enseña los valores del reino a sus hijos para que estos amen a Dios, descubran su potencial, desarrollen sus capacidades y vivan de acuerdo con el propósito de su existencia.
Funciones bíblicas de una madre sabia:
Mediante un acróstico usando las letras de la palabra madre, mostraré las extraordinarias funciones que debe cumplir una madre para cumplir el propósito de la maternidad:
Multiplicar: Procrear con sabiduría.
La madre es un instrumento para la concepción y nacimiento de los seres humanos porque ese fue el sistema elegido por Dios, quien eligió sabiamente a la mujer y la dotó de características extraordinarias para que cumpla esta función.
Con la letra “A” de la palabra madre, ella debe:
Administrar: Unirse a su esposo para guiar a sus hijos para que cumplan la razón de su creación.
Los hijos no conocen la razón de su creación y son papá y mamá quienes tienen que administrar la vida de sus hijos para que comprendan el propósito que Dios tuvo para su creación.
Con la letra “D” de la palabra madre, ella debe:
Discipular: Entrenar a sus hijos para que puedan vivir la vida fructífera y realizada que Dios diseñó.
La madre es responsable de que sus hijos conozcan el potencial, las habilidades que Dios les ha dado y las responsabilidades que deben asumir.
Con la letra “R” de la palabra madre, esta debe:
Reprender: Exhortar sabiamente para que aprendan a hacer lo correcto.
Todos necesitamos amonestaciones para aprender a hacer lo correcto. La madre reprende sabiamente cuando ayuda a sus hijos a identificar sus actos de rebelión, les guía para que establezcan límites saludables, les entrena para que entiendan y sufran el dolor de las consecuencias, los disciplina bíblicamente para acondicionar su voluntad y los restaura para que entiendan lo imprescindible del perdón.
Con la letra “E” de la palabra madre, esta debe:
Entrenar: Instruir a sus hijos para que respondan a las circunstancias de la vida con fundamento sabio.
Papá y mamá deben ser socios sabios que trabajan en unidad en el entrenamiento bíblico de sus hijos. Debido a que la madre es la que generalmente pasa más tiempo con ellos, ella cumple un papel importante en su entrenamiento. La madre debe actuar con sabiduría pues los hijos observan el estilo, las actitudes, palabras y comportamientos de sus madres y tienden a imitarlos.
Compromiso:
Señor, me comprometo a conocer bíblicamente la razón de la existencia de mi rol y esforzarme por cumplir como Tú lo diseñaste.
LECTURA BÍBLICA: Proverbios 31:30