Mayo 3
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
Cuadragésima tercer semana: principios de esperanza.
JEREMÍAS 6:16 ESPERANZA PARA LA FAMILIA: PADRES QUE FUNDAMENTAN SU FAMILIA EN LOS VALORES DIVINOS
“Los padres son los responsables de proveer los principios, así como el ambiente propicio para que sus hijos aprendan cuales son las verdades bíblicas reveladas para que ellos tengan la posibilidad de elegir vivir una vida fructífera y realizada.”
Los cambios culturales que tenemos actualmente en la sociedad son impresionantes, totalmente destructivos y no solo en asuntos relacionados con el hogar y la familia, sino también en las actitudes hacia la verdad y la moralidad cristianas.
Tristemente esta mentalidad liberal moral se ha tomado todos los sectores de la sociedad, pues todo lo que toca la filosofía izquierdista atea y antiética bíblica, lo daña. Han dañado los hermosos conceptos divinos sobre la sexualidad y el matrimonio, han facilitado los divorcios, han producido una destructiva fragmentación en las familias, ideas contradictorias sobre Dios, desafíos a la autoridad de la Biblia, rechazo de las normas y creencias cristianas que alguna vez fueron ampliamente aceptadas. Aunque nosotros como creyentes recibimos la orden de construir nuestros hogares “sobre la roca” del fundamento valórico divino, también ahora ciertos hogares cristianos están construyendo su moralidad “sobre la arena” movediza de las ideas humanistas que apelan a la naturaleza pecaminosa.
Muchos cristianos que aman a Dios y su Palabra se preguntan lo que se pregunta el salmista: “Cuando los fundamentos de la ley y del orden se desmoronan, ¿qué pueden hacer los justos? (Salmos 11:3)
¿Cuál debe ser nuestra respuesta cuando ya no se respetan nuestros valores fundamentales? ¿Qué hacemos cuando los cimientos sobre los que Dios nos manda construir nuestras familias son rechazados y aun odiados? ¿O qué podemos hacer cuando los gobernantes odian la moral bíblica e imponen sus ideologías y teorías? La respuesta de David fue un simple recordatorio de lo que los seguidores de Dios tenían que creer y les dice: “Pero el Señor está en su santo templo; el Señor aún gobierna desde el cielo. Observa de cerca a cada uno y examina a cada persona sobre la tierra. 5 El Señor examina tanto a los justos como a los malvados y aborrece a los que aman la violencia.” En palabras sencillas, la respuesta es que Dios está en control y nosotros debemos seguir sus instrucciones justas para vivir como justos pues los que siguen a los malvados serán disciplinados.
No importa cuan rebelde sea la sociedad, cuan destructivas sean sus ideologías y cuan engañosas sus teorías, nosotros debemos mantenernos firmes en el estudio y aplicación de la verdad. Solo tenemos esperanza de tener una familia saludable si nos afirmamos en la verdad, la comprendemos, la vivimos, la enseñamos y la defendemos.
Compromiso:
Señor, me comprometo a elegir como cimiento de la construcción de mi vida y familia los principios de la palabra de Dios.
LECTURAS BÍBLICAS: Jeremías 6:16, Salmo 11:3-5