Octubre 2
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
Décimo tercera semana: un proceso esencial: de progenitor a padre.
1 CORINTIOS 16:13 EL PADRE MAL PREPARADO: LÍDER EQUIVOCADO QUE NO SE HA DESARROLLADO
“Sea que los padres actuemos irresponsablemente en forma deliberada o que actuemos erróneamente por ignorancia, nuestras acciones irregulares, producirán serios problemas familiares”.
No existen ni padres ni hijos perfectos pues todos cometemos errores y pecados. No todos los padres actúan mal debido a su mala intención, muchos no pueden cumplir sabiamente su función por la falta de preparación. La preparación sabia, bíblica y con la guía profesional nos ayuda a comprender nuestro rol de padres y cumplir con la difícil misión que Dios nos ha entregado. Las buenas intenciones sin la debida preparación no solo producen frustraciones sino que, además, prepara el ambiente para conflictos en nuestras relaciones. Definitivamente el padre mal preparado es un líder equivocado que no se ha desarrollado.
En las sesiones de asesoramiento he descubierto los tristes efectos que produce en su familia un padre mal preparado:
Primero. La falta de preparación produce decepción.
Es obvio que no puede sentirse satisfecho y realizado el padre que ha confundido el amor, el respeto y la autoridad con el dominio necio y la tiranía y debido a que no obtiene los resultados que espera pese a sus buenas intenciones sufre serias decepciones.
Segundo: Debido a la falta de sabiduría y no cumplir con su importante asignación, los padres experimentan tensión y frustración.
Una vida tensionada es el resultado de la frustración experimentada. Los conflictos son parte de la vida familiar y es el padre quien recibe la responsabilidad de liderar la búsqueda de soluciones. Un padre no preparado para cumplir su tarea, y presionado por sus responsabilidades, no sólo experimenta tensión, sino también la produce en la vida familiar.
Tercero: Debido a la falta de conocimiento por no haberse preparado, los padres cometen errores que podrían ser evitados.
Ningún padre puede hacer bien lo que conoce mal y el conocimiento evita serios errores.
Cuarto: La falta de preparación que impide cumplir el rol que por Dios les ha sido asignado, resulta en que los hijos sean perjudicados.
Todo padre es un líder y mientras menos imite el modelo divino, más mal líder es. El padre mal preparado es un líder equivocado que no se ha desarrollado y que por su falta de preparación en su familia producirá destrucción.
Compromiso:
Señor, me comprometo a determinar las áreas en las que no estoy actuando como un padre bien preparado y hacer todo mi esfuerzo por obtener la preparación para no perjudicar a mi familia y evitar la frustración.
LECTURA BÍBLICA: 1 Corintios 16:13; Proverbios 18:15