“Los izquierdistas progresistas prefieren a Satanás y odian a Dios”

“Es natural que un progresista izquierdista ateo, secularista o humanista odie al Dios de la Biblia, que exige que vivamos en santidad y alejados de toda inmoralidad y ame al dios de este mundo Satanás, que enseña, apoya y motiva a seguir las pasiones y aceptar todo acto de inmoralidad.” 

Es increíble que una persona que dice ser cristiana, solo por su interés en ayudar a los pobres se identifique con el comunismo cuyo interés total es la destrucción del cristianismo.  

Los enemigos de Dios pueden ser personas buenas en la sociedad, respetuosas de sus familias y excelentes políticos o trabajadores, pero por su moral antibíblica están listos a aceptar toda ideología, menos la moralidad y la doctrina cristiana; en su religión atea y progresista dan cabida a la bisexualidad, la homosexualidad, la transexualidad, el aborto, el casamiento entre hombre y entre mujeres, y no es condenada ningún tipo de inmoralidad. Ellos abren las puertas de su religión humanista al aborto y lo bautizan como interrupción del embarazado, a los criminales presos a quienes bautizan como personas privadas de la libertad, a los transexuales y los bautizan como personas atrapadas en un sexo al que dicen no pertenecer, y en su fe bautizan a los pedófilos como personas amantes de niños o personas atraídas por menores. Es obvio, los discípulos de Satanás no pueden amar al Padre de la verdad, al Dios de la santidad, ellos aman al engañador, al padre de las mentiras. Por eso sus ideologías, sus teorías son un montón de mentiras humanas envueltas en las opiniones de la falsa ciencia. 

NBC NEWS el 21 de enero publicó que Michael Cassidy un ex piloto de la Marina de los Estados Unidos, un hombre cristiano, republicano, conservador que atacó y decapitó una estatua satánica en el Capitolio de Iowa en diciembre y fue acusado de un delito grave según los estatutos de delitos de odio del estado. Los izquierdistas tuvieron la libertad de quitar la Biblia de las escuelas, prohibir que en oficinas del estado se pongan los diez mandamientos y no permitir ni las oraciones ni la Biblia en las escuelas; aunque no es la forma como debemos protestar, este hombre decidió derribar el altar de Baphomet colocado por el Templo Satánico en el Capitolio de Iowa. 

La pregunta es ¿por qué no han sido perseguidos con la ley y puestos en prisión, o por lo menos multados, los activistas violentos que derribaron docenas de estatuas, incluidas las de Colón, Thomas Jefferson y George Washington? Ninguno fue responsabilizado ni acusado de crimen de odio. Michael Cassidy derriba una estatua de Satán hecha con artículos domésticos y es acusado de crimen de odio y, si es condenado, podría pasar un año en prisión y pagar una multa de 2.560 dólares. Así operan los sistema de justicia de dos niveles en los países con gobiernos izquierdistas que persiguen a los policías e indemnizan a los que crean el caos en la sociedad.  

Los alborotadores de Black Lives Matter nunca fueron responsabilizados por los incendios, los saqueos y la destrucción generalizada y desenfrenada de monumentos centenarios pagados con fondos públicos que honraban no a Satanás sino a los fundadores de Estados Unidos. Derribar una estatua satánica resulta en cargos por delitos graves, mientras que derribar estatuas históricas no tiene consecuencias en los gobiernos izquierdistas.  

Un inmigrante ilegal fue liberado sin la obligación de pagar fianza en Nueva York después de agredir a un oficial de policía, mientras que un padre de familia fue condenado por orar afuera de una clínica de abortos y ahora enfrenta una década en prisión. ¡Bienvenidos al mundo del izquierdismo!

La religión izquierdista odia a Dios y su moralidad, es atea y satánica pues su amo Satanás permite toda la maldad que ellos disfrutan practicar.