Analfabetismo bíblico: creciente mal de un sector de la iglesia moderna.
“No podemos creer bien lo que entendemos mal, no podemos practicar ni enseñar a los hijos lo que no conocemos y no podemos vivir las doctrinas, la moral y la verdad, que no conocemos en profundidad. Es deber del liderazgo terminar con el analfabetismo bíblico congregacional. Es deber de todo cristiano buscar instrucción bíblica y profesional.”
Paul Mackenzie Nthenge, un taxista que decidió convertirse en pastor se entregó a la policía y es acusado de provocar la muerte de más de 70 miembros de la iglesia cristiana que dirige en Kenia. El pastor pidió a sus seguidores que ayunaran hasta conocer a Jesús, y decenas de personas murieron de hambre. En 2003 fundó la Iglesia Internacional de las Buenas Nuevas que tiene más de 3.000 miembros. En su sitio de internet dice que: “La misión de este ministerio es nutrir a los fieles de manera holística en todas las áreas de la espiritualidad cristiana mientras nos preparamos para la segunda venida de Jesucristo a través de la enseñanza y la evangelización.” Según él, la meta de su predica era: “Llevar el evangelio de nuestro señor Jesucristo libre del engaño y del intelecto del hombre.” Su teología suena bien, pero su aplicación es terrible. Promovió la no escolarización de los niños, no iniciar negocios, que ayunen y no busquen tratamiento médico cuando se enfermen. Tristemente todavía hay pastores que enseñan a sus seguidores que le crean a Dios, que no tomen sus medicinas, que le crean a Dios y le entreguen el dinero, que solo oren para terminar con la violencia.” Si usted está bajo ese liderazgo, huya por su vida.
No todas las historias como estas llevan a la muerte física y envían gente al infierno pero es un peligro estar bajo el liderazgo de personas sin ningún entrenamiento teológico porque a pesar de ser bien intencionados, están mal preparados y mantienen a las personas en el analfabetismo bíblico. Por su falta de preparación esos líderes enseñan a la gente sobre el Dios de su imaginación y no el Dios de la revelación.
En los Estados Unidos los investigadores de la empresa Gallup concluyeron lo siguiente: “Los estadounidenses veneran la Biblia pero, en general, no la leen, y porque no la leen, se han convertido en una nación de analfabetos bíblicos.”
Mientras más se conoce de adoración, alabanza, música cristiana, prosperidad y milagros, y menos se estudia la Palabra, menos se conoce la verdad, más vulnerables son las personas a filosofías mentirosas.
Algunas congregaciones tienen excelente compañerismo, algunos ministerios juveniles brindan adoración, entretenimiento, horas de alabanza y otros ministerios infantiles mantienen ocupados a los niños dibujando, comiendo y jugando, pero en el analfabetismo espiritual.
La iglesia moderna tiene millones de niños espirituales que no saben enfrentar sus problemas personales y muchos jóvenes y adolescentes de cristal que no conocen la moral bíblica, cantan verdades que no aplican a su vida personal.
Se ha perdido la centralidad de la predicación bíblica y la ignorancia bíblica convierte a los cristianos en blancos perfectos para que en sus mentes crezcan y den frutos las semillas humanistas.
“Recuerde no podemos practicar principios y verdades que desconocemos. Es obligación de los líderes entrenar, y no solo compartir palabras emotivas con el fin de motivar.”