Septiembre 27
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
2 CORINTIOS 5:17-18 SEÑOR: RESUELVO SANAR MI PASADO
“Un cristiano realmente disfruta la vida cristiana cuando ha enfrentado bíblica y sabiamente todos los conflictos y traumas del pasado, cuando conoce las bendiciones que Dios le da en el presente, y disfruta de ellas diariamente.”
En mis conferencias siempre digo que existen cristianos que ven el futuro con la nuca. Cometen el error de siempre estar mirando al pasado y por ello no disfrutan su presente y preparan un obscuro futuro. Quienes caminan mirando para atrás siempre tropezarán. No pueden vivir vidas saludables quienes viven anclados a los traumas del pasado. Dios nos dio nueva vida y tenemos que aprender a vivirla y para vivir la vida nueva tenemos que lidiar con los traumas del pasado.
Un hombre que fue maltratado y abusado por sus padres puede convertirse en un impávido que no quiere disciplinar a sus hijos para no abusar de ellos o en un maltratador que mantiene o mejora las técnicas de abuso. Quien no trata con su pasado, no puede vivir un buen presente. Una mujer que fue abusada sexualmente cuando adolescente y que quedó traumada por esas relaciones enfermas, cuando se case tendrá serios problemas para disfrutar su vida sexual o no podrá disfrutar, a menos que enfrente esa experiencia traumática que le dejó marcada y aprenda a disfrutar la sana sexualidad que por Dios fue diseñada.
Todos los cristianos que pese a que tienen nueva vida siguen edificando su nueva vida sobre el fundamento erróneo que tenían en el pasado, no pueden tener éxito, están incapacitados.
Pablo escribe a los corintios lo siguiente:
“17 Esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La vida antigua ha pasado; ¡una nueva vida ha comenzado!
18 Y todo esto es un regalo de Dios, quien nos trajo de vuelta a sí mismo por medio de Cristo.
Debido a que fuimos formados y nos relacionamos con seres humanos mortales, falibles, imperfectos, nuestra formación fue imperfecta y nuestra mente no se borra en el momento que obtuvimos la salvación. Seguiremos pensando lo mismo que pensábamos a menos que con la ayuda de Dios, con la guía de hombres de Dios bien preparados y con nuestra responsabilidad personal en la aplicación de la verdad aprendida, cambiemos el fundamento de nuestro sistema de pensamiento.
No pueden disfrutar del éxito las personas que fueron criados por padres abusadores, maltratadores, violentos, infieles, irresponsables y dependientes de droga y alcohol, a menos que lidien sabiamente con su pasado. Quienes fueron criados en ese sistema de familia pecaminoso, sin duda sufrieron experiencias traumáticas que tienen que ser superadas. Cuando por ignorancia, descuido, o rebeldía personal no las trataron bíblica y profesionalmente, aun las mantienen, aunque sean cristianos.
Compromiso:
Señor, me comprometo seriamente a enfrentar mi pasado con la guía de mis líderes sabios y bíblicos pues sé que el pasado me perseguirá toda la vida y seré un cristiano que vivirá inefectivamente, a menos que aprenda a lidiar con él pasado bíblicamente.
LECTURA BÍBLICA: 2 Corintios 5:17-18