Julio 30
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
1 CORINTIOS 13 CREO QUE FUI CREADO CON LA NECESIDAD DE AMAR Y SER AMADO.
Decisión que suple mi necesidad de disfrutar y compartir amor.
“El amor humano no es lo mismo que el amor divino. Los humanos falibles y pecadores debemos imitar el amor de nuestro Dios infalible. Solo imitando el ejemplo divino, podemos tener el verdadero amor que necesitamos los humanos.”
No debe extrañarnos que la octava decisión que debemos tomar sea esta: "Creo que fui creado con la insubstituible necesidad de amar y ser amado, por lo tanto, determino que me amare a mí mismo y a los demás, no basado en las emociones humanas sino en el modelo de amor divino."
Esta decisión suple nuestra necesidad de disfrutar el amor y también la necesidad de compartirlo porque fuimos creados para amar y ser amados. Defino el amor como la virtud divina que ha sido derramado en todos los cristianos para que basados en los parámetros divinos hagamos el bien a las personas sin hacernos daño a nosotros mismos. Sin este tipo de amor, y amando basados en las ideas humanas de amor, no amamos al estilo divino y no podemos vivir la vida que Dios diseñó.
Estos principios deben practicar quienes desean cumplir la orden de amar como Dios ordena:
- Las personas no pueden hacer nada tan malo que me motive a amarlas menos y nada tan bueno que me motive a amarlas más.
- Cumplo la orden de amar aun a los que creo que no lo merecen.
- Cumplo la orden divina de no dar a las personas lo que merecen.
- Cumplo la orden divina de dar a las personas lo que justamente merecen.
- Nunca puedo perder el amor divino por lo que no debo dejar de amar.
- Hago lo correcto, aunque los demás hagan lo incorrecto.
- Amo incondicionalmente, aunque las personas no sean lo que Dios demanda justamente.
- Perdono y pido perdón, aunque no me acepten y no se arrepienta el ofensor.
- Cuando amo conforme al modelo divino amo sin medida.
Los cristianos no debemos creer que el amor es un sentimiento y que es parte del enamoramiento porque el amor al estilo divino no depende de las emociones sino de sabias convicciones.
Compromiso:
“Señór, gracias por amarme como nadie me puede amar. Prometo estudiar seriamente lo que es el amor al estilo divino y comenzar a practicarlo como Tú exiges en todas las instituciones y en todas mis relaciones.”
LECTURA BÍBLICA: 1 Corintios 13