Septiembre 5
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
FILIPENSES 3:7-8 PABLO: EJEMPLO DE ADQUISICIÓN DE LA ÉTICA DEL REINO.
“Todos los que por la gracia de Dios hemos sido trasladados al Reino de la luz, independientemente de nuestro sexo, edad, clase social, educación o posición que ocupemos en la sociedad tenemos la obligación de conocer la nueva ética que Dios exige, vivirla, enseñarla y defenderla.”
Sin importar cuan vacío, rebelde, ateo, humanista, comunista, machista, feminista o progresista haya sido quien por la gracia ahora es salvado, tiene la obligación de vivir como transformado y para ello, debe utilizar los principios que Dios le entrega, el poder que le ofrece y transformarse tal como lo hicieron los apóstoles independientemente del trasfondo que tenían.
Pablo, el perseguidor se convirtió en un seguidor del Cristo que le salvó y tuvo que realizar un cambio radical. De un rebelde violento, espiritualmente relacionado con el error, con emociones cautivadas por sus creencias al punto de ser un apasionado defensor de su fe y asesino de cristianos, se convirtió en un amante de Dios y sus verdades. Pablo tenía una mente llena de argumentos de su religión y su filosofía de vida y tuvo que poner en ella nuevos principios para poder transformar su mente y ser un siervo de Dios. Pablo escribe: “Pero Dios que es grande en misericordia… por esa misericordia me salvo y me dio la posibilidad de transformarme en un siervo de Dios.”
Un ejemplo digno de ser imitado
“La dramática y efectiva conversión de Saulo de Tarso quien después de ser un perseguidor de la fe cristiana se convirtió en un fiel practicante de ella, no solo es la evidencia de la obra divina para la salvación, sino también de la responsabilidad humana en ese proceso de transformación.”
Pablo fue salvador por la gracia divina, buscó la guía de los apóstoles, estudió los principios de la nueva vida del Reino y en forma sistemática fue realizando la conversión de todo su sistema de pensamiento para que ya no esté fundamentado en la religión que había amado y practicado sino en la nueva ética del Reino que ahora Dios le exigía.
La gracia que confrontó a este rabino profesional, miembro de la Corte Suprema de Justicia judía, uno de los setenta más poderosos legisladores, esa misma verdad puede confrontar a no educados o muy educados y después de la salvación ofrecerles la posibilidad de transformación por la aplicación de la verdad. Pablo fue transformado, abandonó todo su sistema de religión y toda su maldad, y vivió y enseñó la ética bíblica y la moralidad.
Compromiso:
Señor, me comprometo a participar con alegría y disciplina del proceso de transformación que Dios exige a todos los que ha entregado la salvación.
LECTURA BÍBLICA: Filipenses 3:7-8
Antonio Alvarez