“El que se hace amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.”

Debido a que los Estados Unidos fue fundado en principios judeo/cristianos por muchos años logró tener una sociedad civil y justa basada en la moral bíblica y que, mediante la autoridad y control legal y firme del gobierno castigaba a los que violaban la ley. Tristemente ese tipo de país ya no existe porque vivimos en la generación post cristiana y los progresistas están convirtiéndose en la mayoría. Y la verdad es que el mundo no es diferente porque los ateos, agnósticos, marxistas, comunistas, socialistas, secularistas, feministas, progresistas, que son parte de la religión humanista y ecologista que tiene por dioses al hombre y la madre tierra, ya son mayoría en el mundo. Ellos dominan los gobiernos, la educación, los medios de comunicación, las redes sociales, el mundo artístico, las instituciones internacionales como las Naciones Unidas, la Organización de Estados Americanos, la Organización Mundial de la Salud, etc. La respetada Constitución de los Estados Unidos, ya no es relevante para muchas personas en el país y en otros países cambian las constituciones para que reflejen su sistema de pensamiento liberal moral.

Existe una lucha frontal contra los valores morales cristianos pues consideran que la ética bíblica y el cristianismo son el último enemigo por vencer. Recuerde que no existe candidato que refleje los valores cristianos en su totalidad, pero es muy distinto votar por el menor de los males, que apoyar, votar, promover a quien odia todos los valores cristianos o la gran mayoría de ellos. Se lo puedo decir con claridad porque hasta pago por entrar a conferencias de los enemigos de la fe para conocer cuánto odian al cristianismo. Después de conocerlos tanto, de conocer sus escritos, sus políticas, sus metas, sus planes y su odio por el cristianismo, puedo decir que todo el que apoya a los enemigos de la fe se convierte en amigo de ellos y en enemigo de Dios. Además, no olvide, apoyar a los enemigos es un poquito de levadura, pero recuerde que un poco de levadura leuda toda la masa.

La religión humanista y ecologista ama a los animales más que a los niños en el vientre materno, prefieren cuidar la tierra para que no se agoten sus productos y para que no exista lo que llaman sobre-población establecen políticas abortistas para limitar el nacimiento de los hijos. Esta religión no cree que exista pecado ni maldad, tampoco cree en el matrimonio entre un hombre y una mujer ni en la masculinidad. Ellos creen que los seres humanos nacen buenos y que son más importantes sus ideologías y teorías que la biología, la anatomía. Ellos no creen en dos sexos creados por Dios y con el propósito de la extensión de la familia humana incluyendo el placer, creen en el placer, aunque se destruya la familia humana de la forma que por Dios fue establecida. Ellos ponen el placer por sobre la biología y no creen que los cromosomas determinen la existencia de solo dos sexos, sino que sus gustos, emociones, sentimientos y pasiones son los encargados de elegir el género y la cantidad de géneros que deseen.

Esta religión no cree en la autoridad de Dios porque para ellos no existe, no creen en la autoridad de los padres, los profesores y aun claman para que la policía sea abolida. Ellos no quieren que los cristianos democráticamente propongamos leyes que favorecen la vida por sobre el aborto, y el matrimonio entre un hombre y una mujer por sobre el matrimonio homosexual, porque son principios religiosos. Pero por los principios de su religión humanista creen que el aborto debe ser legalizado porque es el derecho de la mujer sobre su propio cuerpo, aunque el bebe tenga otro ADN y sea un ser humano distinto. Ellos quieren que la mujer tenga el derecho a asesinar a los no nacidos, nosotros queremos que los niños tengan derecho a vivir. Ellos quieren que el estado eduque a los niños en asuntos morales, nosotros queremos que los eduquen en asuntos profesionales y no enseñen desvíos de la sexualidad y queremos que solo los padres eduquemos sobre la moralidad. Sin embargo, ellos y su religión pueden legalizar todo lo que la Biblia denomina perversión sexual, ellos legalizan la locura de género, no creen en la familia tradicional y desean penas menores para los criminales, motivan la “turbacracia” o la presión de las turbas para cambiar o aprobar leyes, dirigen y motivan las revueltas, los saqueos, los robos por pandillas a negocios de ropa de marca y limitan a la policía para que no los arreste y a los jueces para que no los encarcelen.

La más grande corrupción y la destrucción de la paz ciudadana se logra cuando la verdad absoluta es atacada, ignorada o despedida.  El mundo odia la verdad y elige la mentira eligiendo a políticos mentirosos que ofrecen éxito económico y justicia social basados en sus políticas económicas y sistema de pensamiento con que gobiernan los países más pobres y de los cuales la gente huye.

Cuando la gente elige a exguerrilleros que fueron militantes de grupos subversivos, entonces, entendemos que la mayoría del mundo pertenece a la religión humanista que ama la verdad relativa y odia la verdad del cristianismo.

Cuando la gente elige para que los gobierne a un líder de los estudiantes rebeldes que organizaron rebeliones, saqueos, incendios, entonces, sabe que la religión humanista está gobernando el mundo.

Los que amamos la familia, odiamos el aborto, amamos el matrimonio y creemos en que existen sólo dos sexos, somos atacados y tildados de homofóbicos. Los que amamos la migración legal y las fronteras bien cuidadas somos declarados xenofóbicos. Los que no creemos que los gobiernos nos sacan de la pobreza sino los valores bíblicos, porque nuestra vida es la prueba de ello, somos atacados por solo predicar el evangelio de la cintura para abajo. Somos catalogados de anticuados conservadores los que creemos que la Biblia es inerrante, que es la única regla de fe y conducta. Somos criticados los cristianos que creemos que ningún gobierno de ninguna tendencia política nos puede sacar de la pobreza, y solo lo haremos si conocemos y vivimos los valores morales absolutos y divinos que son parte del cristianismo. Recuerde que para los enemigos de la fe, la ética bíblica debe desaparecer porque nace de un Dios que no existe, de una Biblia que es machista y de una fe que es patriarcal, anticuada, y que debe desaparecer. Por amar al Dios de la Biblia y sus valores absolutos, se nos ataca, se nos desprecia, se nos insulta, se nos cancela. Es obvio que la mayoría del mundo incluyendo asistentes a los templos, ama la verdad relativa y quiere un dios hombre que les permita hacer lo que desean y una diosa naturaleza que aman más que a los niños no nacidos.

Pero la parte más triste es que todo ese mundo humanista y toda esa religión que ama lo que la Biblia condena sea apoyado por algunos que dicen ser cristianos. Algunos creen ser cristianos porque asisten a los templos, otros son cristianos niños, inmaduros que están en el jardín de infantes de la iglesia porque creyeron que el cristianismo era cantar, orar, ayunar, servir, ofrendar, diezmar y tuvieron líderes que nos les obligaron a tomar cursos de ética y moralidad bíblica y por su ignorancia de las doctrinas, teología y la ética bíblica, solo conocen al dios de su imaginación no al Dios de la revelación.

Pablo escribió su carta a Timoteo para que sepa cómo conducirse como miembro de la iglesia de Cristo que es columna y baluarte de la verdad. Quien no obedece a Judas la orden de defender apasionadamente la verdad y de no unirse a los que abusan de la gracia para justificar sus inmoralidades, no cree que la iglesia es la columna y baluarte de la verdad y tiene un sincretismo que Dios odia, es decir, un poquito de cristianismo con un poquito de humanismo que Dios condena.

Recuerde que los que amamos la fe bíblica, la verdad absoluta, los que conocemos, vivimos, enseñamos y defendemos la verdad, siempre seremos un remanente, siempre seremos la minoría. Es mejor llegar al cielo por la fe en Cristo que nos salva por su gracia y siendo parte de la minoría, que ser parte de la mayoría y apoyar a los enemigos de la fe e ir al infierno por tener religión, pero no salvación. Recuerde, el que se hace amigo del mundo se constituye en enemigo de Dios.