Junio 20
Transformación: principios para transformar su vida en un año, un día a la vez.
Quincuagésima semana: jóvenes cristianos fieles en un mundo hostil.
1 PEDRO 3:15 CONOZCA LA VERDAD PARA ENFRENTAR LA NECEDAD
“Aunque nuestro deber en la evangelización no es discutir sino mostrar con nuestras vidas y palabras las virtudes del evangelio que conduce a la salvación, cuando es esencial responder o hacer conocer nuestra fe, debemos estar preparados conociendo bien la verdad para enfrentar la necedad y hostilidad.”
Nuestro deber es conocer lo que ocurre en la sociedad, en nuestros trabajos y en la sociedad para no solo dar ideas cuando conversamos, sino estar bien informados con datos, estadísticas y buen conocimiento de leyes, etc.
Hoy ni siquiera quieren aceptar que la Biblia es verdadera, creen que Dios es lo que cada uno define, no lo que la Biblia revela por lo tanto discutir con ellos es innecesario. Ellos no creen en la espiritualidad que ordena la Biblia sino en una espiritualidad que se puede personalizar para que se adapte a cada persona, al igual que su comida en un restaurante, cada uno elige ser espiritual a su manera. Por eso hablar de la verdad, de Jesucristo la única verdad es nuestra obligación, pero no una herramienta de persuasión. Debemos creer la verdad y compartirla con quien demande una explicación, pero no intentar discusión, peor imponer nuestras ideas pues en la cultura emergente, la verdad ya no es solo subjetiva u objetiva, la verdad, además, es solamente personal.
Hoy la gente desprecia la historia de los países para hacer su propia versión de ella cancelando a los padres de la patria. Hoy no aceptan la verdad sobre la autoridad, sea policía, gobierno, maestros o padres y por lo tanto creen que se debe cancelar la autoridad. Este deseo de seguir sus ideas resulta de la combinación de una cultura profundamente humanista que sigue sus pasiones, la proliferación de nuevos medios y las redes sociales disponibles para miles de millones, donde cada uno da su opinión y cada uno sigue las opiniones o guías que le gusten, sea para comprar un teléfono o para saber como suicidarse. Cada uno elige su propia verdad y esto es lo más peligroso porque la forma más peligrosa de engaño es el autoengaño.
Es destructiva la muerte de la verdad objetiva, porque con ella viene la erosión del civismo, del nacionalismo, la autoridad y el respeto e incluye los ataques al cristianismo.
Es maravilloso conocer y vivir los valores absolutos pues nos mantienen dentro de la moral que sobrepasa la mente humana, pero eso no quiere la sociedad. Quieren valores relativos, todo subjetivo y donde todo es tolerable. Cuando una cultura, por ejemplo, decide que no se tolerará el asesinato, que el asalto es punible o que el robo es un delito, de alguna manera frena las emociones egoístas e impulsivas de la mayoría de las personas y puede presionar a los criminales, pero cuando las protestas violentas, los saqueos, la destrucción de la propiedad de gobierno y privada es permitida calificándolos de levantamientos sociales, afirman la mentalidad criminal o promueven la indiferencia e irrespeto a la autoridad.
Nosotros debemos tener claros nuestros valores para que cuando seamos consultados tengamos respuesta bíblica. La realidad de la sociedad es que rechaza la verdad, no le importan los hechos y cree que no existe pecado, y que la gente roba por ser pobre. Nosotros entendemos la naturaleza humana, después de todo, tiene un lado oscuro, una naturaleza pecaminosa.
Compromiso:
Señor, me comprometo a prepararme para conocer mis doctrinas, teología y ética cristiana para saber defenderla cuando sea esencial.
LECTURAS BÍBLICAS:1 Pedro 3:15, Judas 1:3-4